Japón

Es el tema del momento, el que me ha vuelto a enganchar a twitter y del que me apetece decir algunas palabras...


Japón siempre ha sido un país que me ha fascinado, que he querido visitar (y visitaré algún día, cuando mi economía me lo permita).


En casa nos fascina la cultura japonesa, su gastronomía (allá por dónde voy busco sus restaurantes, dentro y fuera de España), su tecnología (nuestros dos coches son japoneses) y ahora con esta crisis y su respuesta, aún me impresionan más.


Según las noticias que nos llegan desde los medios de comunicación, la cosa está muy pero que muy malita. Sin embargo ellos siguen con su vida normal:


-No hay saqueos en los comercios (que es lo que ocurre cuando la normalidad se altera algo en el resto del mundo)
-No han subido los precios de los productos de primera necesidad
-No hay vandalismo
-Hacen colas interminables si chistar para comprar un billete de bus, comida o combustible...
-Ahorran energía (como dice este tweet de @aasiain Aun en Kioto, donde apenas se han percibido los temblores y no hay cortes de energía, mucha gente tiene las casas con poca luz para ahorrar)


Y sin mencionar a los héroes que están intentando evitar la catástrofe en Fukushima...


Aún así hay quien llama a la calma y comenta, vía twitter (@aasiain, @lapastillaroja, @lamonse etc), que la situación no es tan preocupante como nos la pintan, ¿a quién hacemos caso?




De momento os dejo un video de 4 españoles que llaman a la calma a sus familias:

¿Y ahora, qué?

... Tras 6 años, 5 meses y 8 días de empalmar una beca con otra, de hacer todos los días 90 km de ida y 90 km de vuelta, tras invertir 16000 € (de mi bolsillo) en cursos de doctorado + trabajo de investigación (pues  la primera beca cubría cualquier curso menos el de doctorado), tras pasar un mes en Madrid, dos en Francia y otro mes en Asturias (éste último de 7 meses) separada de mi familia... tras invertir (la Administración Central porque la Autonómica no) dinero y más dinero en toda mi formación, viajes, estancias, cursos, material de laboratorio, papeles.... se acabó la beca ministerial y chimpún.... a la calle, si te he visto no me acuerdo.

Todos sabemos que esto no tiene futuro, que la investigación está muy mal, etc etc. Está claro que en cualquier empresa privada también pueden darte la "patada en el culo en cualquier momento", pero cuando te ocurre, te sientes mal, triste, impotente...
Hace tiempo que la política científica es sacar becas (pues con algún dinero que les venga de Europa o veas tú a saber) pagar a los becarios cuando les venga en gana (según comentarios: "los becarios no tienen que mantener una familia"), darse el bombo que han colocado tropecientos "jóvenes investigadores"... y al finalizar la beca, ¡¡a la calle!! . Y no sacar las nuevas plazas de los investigadores jubilados (ver esta noticia en El Levante y  El País)... así vamos, así. Pero tenemos Circuito de Fórmula 1, señores.

Ahora viene la dura tarea de buscar trabajo y espero tener más éxito que en la vez anterior, nada más terminar la carrera en la que me costó la friolera de 13 meses encontrar ¡¡1 beca!! (claro que una dio a la otra y ésta a otra.... espero no tener más). Pero ahora con más de 35 años y con una dilatada experiencia becal (que no laboral pues las becas si disfrutan y no se trabajan a efectos prácticos) la cosa va a estar chunga chunga.

Mientras tanto, seguiré con mis blogs (esta vez con más insistencia) a ver si podemos pasar de los 27,78€ generados en el mes de febrero a 277,8€, pero insisto, mientras tanto, seguiremos soñando y comeremos croquetas del DIA.

Un beso muy grande a todos.
Dedicado a todos los precari@s de España